¿Qué alternativas hay a las toallitas húmedas para la higiene de los bebés?

las toallitas húmedas de usar y tirar es uno de los productos más usados para la higiene de los bebés porque son muy prácticas y cómodas, pero causan un grave impacto al medio ambiente y tienen un gran coste.

Recientemente han sido noticia, después de que la empresa Centros Comerciales Carrefour ha comunicado la retirada de tres lotes de toallitas  Carrefour Baby Sensitive 72 unidades, por la presencia de Burkholderia contaminans. Esta bacteria puede presentar un riesgo potencial de infección para personas con pieles dañadas o con el sistema inmunológico debilitado.

Pero volvamos al impacto ambiental: hay que recordar que si las toallitas acaban en el entorno natural por no haberse eliminado antes de llegar a la depuradora, pueden tardar hasta 600 años en desaparecer. Además, están compuestas por microplásticos, un material que se ha convertido en uno de los principales enemigos del medio natural, más en concreto de los mares y océanos donde pasan a ser consumidos por animales marinos y terminan entrando en la cadena alimenticia.

Estas son algunas alternativas para evitar usar las toallitas.

Es la alternativa más simple y, desde luego, la más eficaz. Un pasaje el lavabo rápido con un jabón que tenga un pH neutro y sin irritantes. Así lo aconseja la Asociación Española de Pediatría.

Se pueden hacer en casa o comprarlas. Son las toallitas reutilizables. Las compradas suelen estar hechas con terciopelo de algodón en un lado y una microfibra suave en el otro lado para el secado. Son cómodas cuando se tiene prisa o cuando va a salir a la calle. Basta con tenerlas mojadas o llevar un espray para humedecerlas. Estas toallas lavables son una opción bastante viable si se quiere cuidar el medioambiente.

Para mantenerla limpia, hay que limpiarla con agua fría después de cada uso y, una vez al día, con agua caliente y jabón. Para desinfectar la esponja, basta con meterla dentro de la lavadora.

Debido a que las toallas de papel son desechables, son una alternativa viable para las toallitas húmedas para bebés. También se venden sin perfume.

Las quickables son toallitas secas que se utilizan en algunos hospitales. Son similares a las toallas de papel, pero un poco más gruesas y más suaves.

Lo más fácil es poner al niño debajo del grifo y utilizar la mano para dejar el culo del bebé limpio.

El papel higiénico se descompone fácilmente. Es el que se encuentra en los baños públicos y también en las escuelas. Conviene que los pequeños aprendan a lavarse con papel. Además, existe el papel reciclado, mucho más ecológico.

No todos los baños tienen, pero en el mercado se encuentran varias alternativas. Algunos ocupan muy poco espacio y están hechos para bebés.