El placer femenino estuvo en la sombra durante siglos, olvidado en favor del hombre y sus gustos. Así, los primeros juguetes sexuales que se vendieron, aún estando destinados a la mujer, no eran más que reproducciones de falos. Pero eso cambió hace solo unos años y en el mercado irrumpieron todo tipo de juguetes sexuales destinados a ellas, con los succionadores de clítoris como buque insignia.
La última valoración del mercado global de juguetes sexuales se estimó en 23.700 millones de euros; y en 2023 se espera que llegue a los 30.000 millones. Así que no es de extrañar que ahora los fabricantes hayan querido ponerse al día con la otra mitad de su público potencial, los varones. En su campo, los juguetes sexuales estaban menos actualizados que los femeninos.
Así que ha llegado Ion, un aparato del fabricante Arcwave. Se trata de un juguete sexual para el hombre, o stroker, creado para intensificar la experiencia del orgasmo masculino.
Según el fabricante, el aparato usa ondas de aire pulsantes que estimulan los receptores de Pacini en la punta del pene (a lo que llamamos frenillo). Estos receptores son los mismos que se encuentran en el clítoris, y son responsables de orgasmos intensos.
Ion es el primer juguete sexual para el hombre con tecnología Pleasure Air del mundo (sale al mercado español con un precio de 189 euros).
El frenillo contiene las mismas terminaciones nerviosas y receptores de Pacini que el clítoris, responsable de los intensos orgasmos femeninos. Sin embargo, seg´nen los hombres es más difícil estimular estas terminaciones nerviosas, algo en lo que se centra Ion.
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