Ser conscientes de la propia respiración y saber controlarla supone un beneficio para la salud, ya que puede servir como forma de relajación ante situaciones que producen nervios e, incluso, puede ayudar a conciliar el sueño en las noches de insomnio.
Así lo explica Andrew Weil, director de Medicina Integral de la Universidad de Arizona, que explica en un artículo diferentes técnicas de respiración, entre las que destaca la denominada 4-7-8 que, bien realizada, puede ayudar a conciliar en sueño en tan solo un minuto.
La técnica 4-7-8 o respiración relajante es un ejercicio muy sencillo, ya que se tarda muy poco en realizarlo y se puede hacer en cualquier lugar y momento: "Este ejercicio de respiración es un tranquilizante natural para el sistema nervioso", explica Weil.
¿Cómo se realiza este ejercicio?
Aunque se puede hacer en todas las posiciones, lo mejor es sentarse con la espalda recta y apoyada en un respaldo. Aunque para dormir no se podría tener esta postura, el ejercicio puede practicarse así.
Después, colocando la punta de la lengua justo detrás de los dientes frontales superiores, manteniéndola ahí durante todo el ejercicio, se comienzan las inhalaciones y exhalaciones, tal y como se explica a continuación:
- Exhalar por completo por la boca, haciendo un silbido.
- Cerrar la boca e inhalar silenciosamente por la nariz, contando mentalmente hasta cuatro.
- Aguantar la respiración mientras, contando hasta siete.
- Exhalar por completo por la boca, haciendo un silbido y contando hasta ocho.
- Para realizar el ejercicio completo, hay que realizar este ciclo tres veces más, es decir, un total de cuatro repeticiones.
Para realizar la técnica correctamente hay que tener en cuenta que las inhalaciones hay que hacerlas de forma silenciosa y por la nariz, mientras que las exhalaciones hay que ejecutarlas por la boca y de forma audible, manteniendo la lengua todo el rato en la posición indicada.
Además, hay que cumplir con los tiempos, ya que la proporción 4-7-9 es importante para que la técnica funcione y cause el efecto deseado. De este modo, durante las primeras prácticas, puede que no surta efecto, ya que es una técnica que debe trabajarse.
Cuando se practica todos los días y se consigue realizar este ejercicio de forma efectiva, puede utilizarse tanto para situaciones de nervios o estrés, así como para conciliar el sueño durante las noches de insomnio.
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