Varios países han frenado el suministro de las vacunas AstraZeneca entre la población de forma preventiva ante los casos registrados de trombosis que, aunque son pocos, son significativos, según explicaron en la rueda de prensa de este lunes la ministra de Sanidad, Carolina Darias, y la directora de la Agencia Española del Medicamento, María Jesús Lamas.
Así, aunque la ministra dio un mensaje de "calma y tranquilidad", también especificó que, en el caso de las personas que ya han recibido la primera dosis de la vacuna, deben estar pendientes de los síntomas que no sean los comunes y se salgan de lo habitual.
¿Qué síntomas deberían preocupar?
La fiebre, el dolor en el lugar de vacunación, las cefaleas o el malestar son síntomas comunes asociados tanto a la vacuna de AstraZeneca como a otras, sin embargo, estos aparecen durante los primeros días y se controlan con analgésicos.
De este modo, la ministra ha explicado qué síntomas son los que deben preocupar: "Los síntomas son dolor de cabeza muy intenso, inusual, que se incrementa al tumbarse, que no cede con analgésicos, y se acompaña de vómitos, de alteraciones visuales o sangrados irregulares".
Estos síntomas fuera de lo normal podrían aparecer entre los 3 y los 14 días después de recibir la dosis de la vacuna, por lo que las personas ya vacunadas deben estar alerta y, en caso de notar síntomas que no se corresponden con lo habitual, "consultar al médico de referencia".
Por último, en cuanto a los trombos, en el único caso español que se ha dado, ha sido concretamente una trombosis venosa cerebral, acompañada de una disminución de plaquetas.
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