Así afecta fumar a los dolores de espalda

fotografo: Jorge Paris Hernandez [[[PREVISIONES 20M]]] tema: Tabaco. Fumar. — Un hombre fumando. Autor: Jorge Paris

El tabaco es uno de los principales problemas de salud pública en todo el mundo y encabeza el de muertes evitables. Cada día son más las enfermedades que relacionamos con el hábito de fumar, pero de lo que no todos somos conscientes es de que fumar multiplica por seis el riesgo de sufrir degeneración de columna. En España se calcula que el tabaco causa dolor de espalda en el 30 por ciento de los fumadores.

Dr. Ignasi Catlá

Neurocirujano y subdirector del Instituto Clavel

Existen diferentes estudios científicos que afirman que los fumadores son más propensos a sufrir dolor de espalda crónico, especialmente lumbar. Esto se debe a que el tabaco provoca mayor sensibilidad a los dolores musculares y reduce la capacidad de resistencia a esta dolencia, además de aumentar el número de químicos conductores del dolor que circulan en la sangre. Estos mismos estudios han comprobado que al dejar de fumar este dolor se reduce.

Imagen de archivo de una mujer deprimida.

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Fumar afecta a la calidad de los huesos

El tabaco tiene, además, relación directa con el empeoramiento de la calidad ósea vertebral, lo que aumentan el riesgo de sufrir osteoporosis y fracturas, y con el desarrollo de artropatía facetaria lumbar. La nicotina, uno de los componentes del tabaco, causa malnutrición de los discos y la mayor concentración de monóxido de carbono en fumadores disminuye la capacidad de transportar oxígeno por parte de la hemoglobina causando un mal riego vascular del disco. Además, fumar estimula la producción de marcadores inflamatorios que degradan el disco y su matriz.

Aunque el tabaco no es la única causa de los dolores de espalda, al incrementar el riesgo de degeneración de los huesos, también aumentan las probabilidades de que hay que intervenir quirúrgicamente, ya sea a nivel cervical o lumbar y el tabaquismo favorece la mala cicatrización de heridas.

El tabaco nos degenera con el tiempo

A media que cumplimos años, a la degeneración natural que sufren los huesos se le suman los efectos del tabaco, por eso es necesario dejar de fumar. Si no lo conseguimos hacer de manera drástica, podemos empezar a reducir el consumo de manera progresiva hasta dejarlo o consultar con el médico de cabecera para conseguir ayuda médica para lograrlo.

Además, como siempre recomendamos, es importante cuidar nuestra columna haciendo ejercicio, manteniendo una buena higiene postural y cuidando de nuestra alimentación. Dejar de fumar mejorará, además, nuestra calidad de vida.