El llamado 'oro líquido' en España, aderezo imprescindible y saludable en casi todas sus aplicaciones ingeridas o por vía tópica, se revela como el aceite natural más efectivo para mejorar la hidratación y calidad de la piel y el cabello.
Por lo que respecta al cabello, el aceite de oliva trata de manera intensiva dermatitis seborreica del cuero cabelludo, al tiempo que ayuda a reducir la descamación y la inflamación; minimiza el daño generado por procesos químicos, gracias a sus propiedades emolientes y protectoras que permiten mantener la integridad de la cutícula del cabello; e hidrata y fomenta la elasticidad capilar en el día a día.
Durante la presentación World Olive Oil Exhibition (WOOE) sobre los beneficios del aceite de oliva virgen extra sobre la piel en general, y el cabello en particular, la dermatóloga y divulgadora Ana Molina nos explica cuáles son las conexiones reales entre este alimento estrella de la dieta mediterránea y la salud capilar. Una pista: los fitoesteroles tienen gran parte de la 'culpa'.
AOVE, aliado en la protección solar y la salud de la piel en general
En lugares con un sol tan potente como es España, el consumo habitual del aceite de oliva virgen extra es muy beneficioso para la salud porque refuerza la barrera protectora de la piel, ayudando a los productos solares a absorber los rayos UVB gracias a sus antioxidantes. En cuanto a la limpieza de la piel, el aceite de oliva facilita la eliminación de la suciedad sin alterar su equilibrio natural, debido a sus propiedades lipofílicas.
Pero aún hay más. Entre los beneficios principales del aceite de oliva se encuentran sus potentes activos hidratantes, su efecto antioxidante tópico y la mejora en enfermedades de la piel, como la dermatitis atópica o la psoriasis.
Según todas las investigaciones llevadas a cabo recientemente, la doctora Molina afirma que "el AOVE también ofrece grandes beneficios relacionados con la estética. Al masajear las uñas y las cutículas con aceite de oliva, se fortalece y mejora su apariencia. Ayuda al mismo tiempo a pacientes con onicomicosis (infección de las uñas por hongos) por su gran capacidad de penetrar profundamente en la matriz ungueal, reduciendo su sequedad y fragilidad".
En cuanto al cabello, el aceite de oliva trata de manera intensiva la dermatitis seborreica del cuero cabelludo, ayudando a reducir la descamación y la inflamación que lleva asociadas. De la misma manera, el consumo de este producto vegetal tiene la capacidad de reducir el daño generado por procesos químicos, gracias a sus propiedades emolientes y protectoras, que mantienen la integridad de la cutícula del cabello, y la hidratan.
¿Previene el AOVE la caída del cabello?
Que el aceite de oliva es capaz de fortalecer el folículo piloso, parece una evidencia ampliamente consensuada. Gracias a la vitamina E y los polifenoles que contiene, a quienes lo ingieren habitualmente podría ayudarles a mantener un pelo más fuerte y menos quebradizo. Se trata de dos potentes antioxidantes que protegen la barrera del cuero cabelludo frente a las agresiones externas. No olvidemos que el cuero cabelludo, también es piel.
Además, preguntada la dermatóloga sobre la posibilidad de que el aceite de oliva tenga cierta capacidad para frenar la caída del cabello, nos explica que "los nutrientes que aportan tanto el aceite de oliva (el más potente en fitoesteroles y fitoestrógenos) como el aguacate y frutos secos como los pistachos y las nueces, nos protegen sin duda del efecto de las hormonas masculinas en el pelo, responsables de su fragilidad. Los fitoesteroles son el equivalente al colesterol en el reino vegetal, y son muy necesarios".
Se ha observado, desde el punto de vista científico, "que los fitoestrógenos presentes en el aceite de oliva pueden tener efecto antiandrogénico a través de la inhibición de la enzima 5-alfa-reductasa, que convierte la testosterona en dihidrotestosterona (DHT). La DHT es una de las principales causas de la alopecia androgenética, ya que provoca la miniaturización de los folículos pilosos. Al reducir los niveles de DHT, los fitoestrógenos pueden ayudar a prevenir o ralentizar la progresión de la alopecia androgenética".
Además, algunos estudios han sugerido que los fitoestrógenos pueden estimular el crecimiento del cabello al mejorar la circulación sanguínea en el cuero cabelludo y aumentar la proliferación de las células de los folículos pilosos.
¿Y si aplico el AOVE de forma tópica, qué beneficios obtendré?
Aplicado directamente sobre el cabello, el aceite de oliva "ha demostrado mejorar sus cualidades estéticas, en especial en lo que se refiere al brillo y la suavidad", comenta la doctora Molina. Además, "posee un efecto nutritivo sobre el cabello y la piel del cuero cabelludo".
Un estudio científico publicado en el Journal of Cosmetic Science ha evaluado los efectos de varios aceites, incluyendo el aceite de oliva, en la hidratación y elasticidad del cabello. Los resultados mostraron que el aceite de oliva mejora significativamente la hidratación del cabello y su resistencia a la rotura, debido a su capacidad para penetrar en la fibra capilar y su alto contenido de ácidos grasos esenciales.
Y continuando con la evidencia científica, la dermatóloga añade: "Otro estudio publicado en el International Journal of Trichology investigó el impacto de varios tratamientos con aceites en el daño capilar causado por procesos químicos como el tinte. El aceite de oliva se mostró eficaz para reducir ese daño, gracias a sus propiedades emolientes y protectoras que ayudan a mantener la integridad de la cutícula del cabello".
Todas las cualidad anteriormente enumeradas repercuten positivamente en la salud capilar general y, por tanto, en la evitación de la caída del cabello.
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