Cada vez somos más conscientes de lo importante que es cuidar nuestra salud mental, pero todavía queda mucho por hacer para que estos problemas desaparezcan. En España, la ansiedad es el problema de salud mental más frecuente, afecta al 6,7% de la población, según datos del Ministerio de Salud, y estos son solo los datos de quienes han sido oficialmente diagnosticados, lo que podría suponer un número aún mayor de personas afectadas.
Es uno de los motivos más frecuentes para acudir a las consultas de los psicólogos y afecta en mayor medida a las mujeres, el número de ellas que lo sufren duplica a la cifra de hombres que padecen esta afección. La atención profesional es necesaria para hacer frente a este mal, pero puede sernos útil para lidiar con ella contar con algunos trucos que puedan ayudarnos a calmarnos en momentos en los que sentimos que nuestros niveles de ansiedad y estrés comienzan a dispararse.
Acupresión: el punto que debes presionar para calmar la ansiedad
Es importante escuchar a nuestro cuerpo y la ansiedad es la respuesta de este ante situaciones nuevas o que nos producen estrés. Los momentos de ansiedad puntual nos ayudan a lidiar con algunos problemas, pero no es lo mismo que padecer trastornos de ansiedad, en los que esas sensaciones de angustia no desaparecen ni nos ayudan. En muchos casos es necesario acudir a la consulta de un especialista e incluso recurrir a la medicación, pero en otros, seguir algunos consejos y hacer algunos cambios en nuestra vida ya nos ayudará a ver algunas mejoras.
Suele recomendarse tener una buena rutina de sueño, no solo dormir las horas necesarias, también que el sueño sea de calidad. Una alimentación equilibrada y rica en nutrientes puede ayudar a que el cuerpo gestione mejor los momentos de ansiedad y estrés, tampoco conviene pasarse con la cafeína, en momentos de agobio conviene reducirla. El ejercicio físico también ayuda, porque hace que el cuerpo libere endorfinas. Establecer prioridades, llevar un diario, apoyarse en los seres queridos… y sobre todo, es clave buscar ayuda si la necesitamos.
Se puede recurrir a técnicas de meditación, pero otra forma de intentar lidiar con la ansiedad es la acupresión, una práctica de la medicina tradicional china que consiste en ejercer presión sobre una parte del cuerpo para ayudar a que la persona se sienta mejor. Es una técnica parecida a la de la acupuntura, pero en este caso se suele hacer esa presión con los dedos, pero también puede hacerse con algún tipo de dispositivo.
Para reducir el estrés y la ansiedad hay un punto que se puede autopresionar, tal y como explican desde el Memorial Sloan Kettering Cancer Center de Nueva York. Se trata de un punto que se encuentra entre las cejas, en la frente y no en el puente de la nariz, un punto de presión Extra-1 o Yin Tang. Suele hacerse presión con el pulgar o con el índice y hacer pequeños círculos (en sentido horario o en sentido contrario) durante dos o tres minutos.
Es importante que la presión sea firme, pero que no duela y se puede hacer varias veces al día hasta que los síntomas mejoren. Eso sí, no conviene hacer este ejercicio si la zona de este punto se está pelando, tiene una herida o hay un sarpullido en la zona o cerca del mismo. Tampoco si existe enrojecimiento o inflamación.
Ansiedad, qué es y síntomas más frecuentes
La ansiedad es un sentimiento de temor, miedo o inquietud que puede darse en situaciones de estrés. Puede ayudarnos a afrontar una situación, proporcionándonos un extra de energía, pero en las personas con trastornos de ansiedad puede llegar a resultar abrumadora, porque ese miedo no es temporal.
Existen varios tipos de trastornos de ansiedad, como el de ansiedad generalizada, que son preocupaciones excesivas ante problemas comunes, como la salud o el dinero, el trastorno de pánico, con ataques repentinos de pánico sin que exista un peligro aparente, y también las fobias, miedos intensos antes situaciones que no suponen un peligro real.
En general suelen tener síntomas parecidos, como pensamientos difíciles de controlar, que les hacen sentir inquietos y que no desaparecen. Cambios en el comportamiento y también síntomas físicos, como aceleración del latido del corazón, dolores o molestias inexplicables, mareos o falta de aire. Son problemas que suelen requerir ayuda profesional porque no podemos superarlos solos.
Referencias
Acupresión para el estrés y la ansiedad. (s. f.). Memorial Sloan Kettering Cancer Center. https://www.mskcc.org/es/cancer-care/patient-education/acupressure-stress-and-anxiety
National Library of Medicine. (s. f.-b). Ansiedad. https://medlineplus.gov/spanish/anxiety.html
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