Envejecer es un proceso natural que parece que cuesta asumir a gran parte de la sociedad actual. Los malos hábitos como el consumo de alcohol o el tabaquismo pueden provocar un envejecimiento prematuro. Existen fórmulas para combatir el envejecimiento que no requieren de ningún tipo de tratamiento estético o quirúrgico, se basan en hábitos saludables y en controlar la exposición a ciertos elementos. Una investigación reciente apunta concretamente a una sustancia presente en algunos productos cotidianos que además de acelerar el envejecimiento, afecta negativamente al ADN.
¿Qué es el envejecimiento prematuro?
El envejecimiento prematuro, también llamado vejez temprana, es un fenómeno que acelera la aparición de signos y síntomas de la ancianidad. Todas las personas experimentamos un envejecimiento natural a medida que cumplimos años, este proceso se ve reflejado tanto exteriormente como interiormente.
La piel es el principal indicador externo de este proceso natural, pues en ella aparecen cambios significativos como arrugas, manchas y flacidez. Nuestro organismo también experimenta una degradación gradual que afecta a su conjunto, bajada de defensas, pérdida de calidad ósea, disminución de capacidades auditivas y visuales... Por todo ello, las personas mayores son más vulnerables ante la mayoría de enfermedades.
El envejecimiento prematuro implica que la persona afectada comience a experimentar síntomas físicos y emocionales característicos de edades más avanzadas. Aunque existe cierta carga genética que puede ser responsable de este suceso particular, lo cierto es que, los factores ambientales y los hábitos de vida son determinantes a la hora de hablar de envejecimiento prematuro.
Entre los signos de alarma más destacables del envejecimiento prematuro destacan: cansancio generalizado, pérdida de apetito, falta de equilibrio, sequedad en la piel, problemas para memorizar y depresión. El conjunto de la sintomatología supone una importante disminución en la calidad de vida de la persona afectada.
Una mala alimentación acelera el proceso de envejecimiento prematuro, así como la falta de descanso, el estrés y la sobreexposición al sol y a la contaminación ambiental.
La sustancia descubierta por científicos japoneses que propicia el envejecimiento prematuro
El hallazgo supone un importante avance en cuanto a métodos para combatir los signos tempranos de la edad en personas sanas. De hecho, aunque no es el tema principal, el estudio publicado en la revista científica Nature Cell Biology, incluye diferentes estrategias para ralentizar el envejecimiento.
El protagonista de la investigación es un compuesto llamado aldehído, presente en numerosos productos cotidianos, como el alcohol. Según los estudios llevados a cabo por científicos de la Universidad de Nagoya en Japón, el aldehído podría dañar considerablemente el ADN de aquellos que lo consumen, y favorecer el envejecimiento prematuro.
La investigación también ha desvelado informaciones relevantes relacionadas con la vejez temprana, como la progeria, una enfermedad que daña diferentes órganos al unísono, supone un elevado riesgo de desarrollar cáncer y tiene un alto índice de mortalidad. Según la investigación el aldehído provoca un envejecimiento celular irreversible puesto que es reactivo con el ADN y las proteínas del organismo, lo que impide llevar a cabo procedimientos necesarios para experimentar un envejecimiento saludable.
El hallazgo que relaciona la resaca y el aldehído
Durante la investigación, los científicos japoneses llegaron a una conclusión importante en relación al síndrome AMeD, el trastorno genético más frecuente de la sociedad japonesa que se refiere al enrojecimiento de la piel cuando las personas que beben alcohol. Ocurre debido a la actividad contraproducente de la enzima aldehído deshidrogenasa, responsable de descomponer los aldehídos, para que una vez el hígado lleve a cabo la metabolización, finalmente se elimine su toxicidad.
Cuando los niveles de la enzima aldehído deshidrogenasa son insuficientes los cetaldehídos se acumulan, lo que explica el malestar que se experimenta con la resaca. Además, estos niveles bajos de la enzima combinados con la ingesta de alcohol, suponen un incremento significativo del riesgo de padecer cáncer de boca, esófago o estómago.
Las investigaciones deben continuar, sobre todo en relación a los tratamientos y fármacos destinados al envejecimiento prematuro y otras patologías relacionadas. Sin embargo, sí que se ha llegado a una conclusión muy clara que apunta que hay que evitar la exposición al humo y la contaminación ambiental, así como eliminar por completo los hábitos de tabaquismo y consumo de alcohol para prevenir y/o frenar el envejecimiento prematuro.
Referencias
Yasuyoshi Oka, Yuka Nakazawa, Mayuko Shimada & Tomoo Ogi (2024) Endogenous aldehyde-induced DNA–protein crosslinks are resolved by transcription-coupled repair https://www.nature.com/articles/s41556-024-01401-2
Drª. Aleksana Viana (2023) Tua Saude https://www.tuasaude.com/es/envejecimiento-prematuro/
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