Cada vez tenemos más claro que existe una relación estrecha entre nuestra salud mental y la fisiológica, y entender los mecanismos precisos podría ayudarnos a encontrar nuevas formas de prevenir algunos de los peores desenlaces.
La hipertensión puede provocar desde ataques cardiacos, accidentes cerebrovasculares o problemas renales hasta cambios en la memoria y la comprensión o demencia.
La marcha nórdica aumenta el gasto de calorías al andar y el número de músculos que empleamos, lo que puede tener consecuencias positivas para nuestra salud.
La evidencia sugiere que el té podría protegernos frente a varias enfermedades, aunque aún es necesario investigar más a fondo esta cuestión. Similarmente, hay algunas precauciones que deberíamos guardar al consumirlo.
El edema muchas veces es leve y se soluciona por sí solo, pero en algunos casos puede ser un síntoma de una enfermedad grave. Por ello, conviene estar atento a los signos, saber identificarlos y saber cómo actuar.
Investigadores de Estados Unidos descubrieron que el ejercicio afecta a miles de moléculas y células de los órganos. Los cambios más extremos se producen en la glándula suprarrenal, que produce hormonas que regulan la inmunidad, el metabolismo y la presión arterial, entre otros.
Mantener los niveles de presión arterial bajo control es clave para prevenir problemas cardiovasculares graves, especialmente con el paso de los años. Descubre qué valores son considerados normales por la comunidad médica.
Aunque estamos familiarizados con las altas tasas de mortalidad de las enfermedades cardiovasculares, no lo estamos tanto con aquellas que pueden provocar la muerte súbita en la población más joven.
Un estudio revela que la actividad física disminuye la actividad cerebral relacionada con el estrés, especialmente en personas con depresión. Una enfermedad que afecta al 6,7% de la población adulta en España.
Los azúcares añadidos pueden aumentar el riesgo de padecer diabetes de tipo 2 de forma tanto directa como indirecta. Eso sí, no parece que suceda lo mismo con los azúcares presentes en frutas y verduras.
Hasta ahora, se usa principalmente para reducir la glucosa en sangre en las personas con diabetes de tipo II; no obstante, investigaciones recientes apuntan a que esto podría ser sólo el principio.
"Cuidar la salud mental es fundamental para lograr una buena calidad de vida y, en última instancia, una buena salud general". Marina Dasso propone diez acciones de autocuidado que podemos integrar en nuestra vida diaria tanto en el entorno personal como en el laboral.
Evaluando los estudios y los beneficios generales de ambas posturas, quizás sea el izquierdo el más recomendado por la comunidad científica, pero el lado derecho también proporciona ventajas nada desdeñables.