Adiós al café: esta es la mejor forma de dejar de tomarlo según Harvard

Un gran número de españoles son orgullosamente cafeteros, y eso está muy bien siempre que no nos pasemos de la dosis diaria que ya no es saludable (cuatro tazas como máximo) para personas adultas sanas.

Imagen de una taza de café.
Se calcula que en España se beben por persona 500 tazas de café anuales, lo que resulta un promedio  de más de una diaria, aunque las dosis se incrementan en algunos casos más allá de lo saludable (cuatro tazas).
Getty Images / iStockphoto
Imagen de una taza de café.

Si pensamos en cuántos cafés tomamos al día es probable que para muchas personas la cifra esté cercana a las tres o cuatro tazas. Hasta aquí todo bien, pero si son más de cuatro estaríamos hablando de 400 miligramos al día: la cifra límite de lo considerado saludable. En España bebemos al año 500 tazas, unos cuatro kilos por persona, según la Asociación Española del Café. Quizás uno de los propósitos del nuevo año sea dejarlo completamente o al menos tomar menos. Harvard nos dice cómo hacerlo.

Los beneficios y perjuicios de la cafeína en nuestra dieta es objeto de estudio científico desde hace años en la Universidad de Harvard. Investigadores como Michael Miller, conscientes de su notable consumo a nivel mundial, aconsejan cómo disminuir un consumo excesivo.

La paciencia, la mejor aliada

No es realista dejar el café de la noche a la mañana, sobre todo si hemos tomado durante años cuatro o más tazas al día. Lo más aconsejable y beneficioso para la salud es reducir las cantidades poco a poco, siguiendo las recomendaciones de Miller.

Miller apuesta por tanto porque las cantidades de cafeína se bajen poco a poco, entre un 10 y un 20 por ciento a lo largo de los días. A continuación, ver cómo se asimila esa falta de estimulante y si todo va bien, el número de tazas debe seguir disminuyendo progresivamente.

Para esos primeros días, desde la Universidad de Harvard apuntan una segunda opción: combinar café y descafeinado. Éste puede ser por tanto un buen aliado en esos primeros días, de forma que aunque la primera taza del día sea como siempre, el resto podrían ser sin tanta cafeína de forma que el cuerpo empiece a habituarse a ese déficit.

De seguir estos sencillos pasos, Miller asegura que en diez semanas el café ha desaparecido de nuestra vida. Y esto tampoco es una tragedia porque afortunadamente hay más opciones energizantes tanto para el desayuno como para otros momentos del día

Otras bebidas posibles para obtener energía

  • Té verde o matcha: son los tipos de té con menos cantidad de teína, así que aunque estemos consumiendo otra bebida estimulante, ésta será de menor grado que la habitual taza de café.
  • Un batido verde: si nos animamos a hacerlo en casa solo tenemos que procurar tener en la nevera verduras de temporada de hoja verde y frutas que endulcen el sabor de la bebida.
  • Leche dorada: leche vegetal hervida con cúrcuma y condimentada con especias vigorizantes como el jengibre, la canela o la pimienta negra.

Referencias

Asociación Española del Café (s.f.). Datos del sector del café. https://www.asociacioncafe.com/datos-cafe/

Harvard Health Publishing (2009). Quitting caffeinehttps://www.health.harvard.edu/staying-healthy/quitting-caffeine

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