La etapa central del cohete Long March 5B que China utilizó para el lanzamiento de tercer y último módulo de la estación espacial china Tiangong entrará hoy en la atmósfera terrestre de forma incontrolada. Este es el cuarto cohete chino que regresa a la Tierra sin control y los científicos llevan tiempo alertando de que tarde o temprano podría haber daños humanos si no se toman medidas.
Las estimaciones realizadas por The Aerospace Corporation situaban España entre uno de los posibles lugares en los que podría estrellarse el cohete (si no se desintegraba antes en la atmósfera). Por ese motivo, varios aeropuertos han suspendido su actividad aérea durante 40 minutos esta mañana, para evitar daños mayores.
El cohete Long March 5B
La Academia China de Tecnología de Vehículos de Lanzamiento (CALT) es la que desarrollo el Long March 5B, que está capacitado para lanzar módulos pesados, de hasta 25.000 kilogramos, a la órbita terrestre baja.
El primer vuelo que se hizo con este modelo perteneciente a los Long March 5 se efectuó el 5 de mayo de 2020 con éxito. El 5B tiene un carenado de 20,5 metros de largo y 5,2 metros de diámetro y consigue colocar carga útil de hasta 25 toneladas en órbita en solo 488 segundos desde el despegue.
El Long March 5B se ha convertido en el objeto espacial más grande en realizar una reentrada en la atmósfera incontrolada desde la desintegración de la estación espacial soviética Salyut 7 en 1991. Las anteriores veces que este modelo ha regresado a la Tierra ha caído en la costa occidental de África, en el Océano Índico y en el norte de Borneo (Asia).
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