El lanzamiento del primer vuelo tripulado de la nave espacial Starliner ha sido cancelado esta madrugada cuando faltaban dos horas para su despegue con destino final a la Estación Espacial Internacional (EEI, por sus siglas en español).
Este vuelo se ha suspendido porque los equipos de control han detectado un "comportamiento anómalo" de la válvula de regulación de presión en el tanque de oxígeno líquido de la etapa superior Centaur del cohete ULA Atlas V. Además, en un comunicado emitido por Boeing, la compañía señala que "los ingenieros están analizando los datos para comprender completamente el problema y determinar las acciones correctivas".
La nave espacial Startliner tenía previsto despegar este martes 7 de mayo a las 04:34 hora española peninsular, desde el complejo de lanzamiento de la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral (Estados Unidos), con los astronautas de la NASA, Butch Wilmore y Suni Williams, a bordo. Sin embargo, tras este retraso, ni la agencia espacial estadounidense ni Boeing han anunciado una posible fecha de lanzamiento.
Boeing suma otro retraso
El retraso de hoy, 7 de mayo, se suma a una serie de contratiempos que ha registrado la nave Starliner, que logró volar hasta la EEI en una primera misión de prueba sin tripulación en mayo de 2022, tras dos intentos fallidos en 2019 y 2021.
Además, de cara a su primera misión tripulada no han escaseado los percances para Boeing, que había programado para el 21 de julio de 2023 el lanzamiento de esta misión. Sin embargo, el descubrimiento de unos fallos en el sistema de paracaídas y en unas cintas aislantes de fibra de vidrio obligaron a aplazar el lanzamiento.
La importancia del primer vuelo tripulado de Starliner
Si el segundo intento de lanzamiento sale según lo previsto, el éxito de la misión supondría para la NASA contar con un segundo proveedor, después de SpaceX, para el transporte de misiones tripuladas y de carga a la Estación Espacial Internacional.
Por otro lado, Starliner atracaría en la EEI para que los dos astronautas permaneciesen, alrededor de una semana, en el laboratorio orbital antes de emprender el retorno hacia el suroeste de Estados Unidos, donde la nave espacial aterrizaría con un sistema de paracaídas. Asimismo, una vez completada la misión, la NASA empezaría el proceso final de certificación de Starliner para futuras misiones tripuladas a la Estación Espacial Internacional, debido a que dicha nave sería capaz transportar cuatro astronautas, o una combinación de tripulación y carga, para misiones en la órbita terrestre baja.
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