El gerente del Programa de Tripulación Comercial de la agencia espacial estadounidense, Steve Stich, confirmaba hace unos días que no tienen prisa por traer de vuelta a los astronautas 'atrapados' en la Estación Espacial Internacional, ya que la NASA y Boeing continúan trabajando para resolver los problemas técnicos para que la cápsula Starliner pueda regresar a la Tierra.
En un comunicado publicado ayer, ambas instituciones explicaban que siguen estudiando los problemas que ha tenido el sistema de propulsión de la nave espacial.
De hecho, actualmente, los equipos están realizando pruebas terrestres en las instalaciones de pruebas White Sands de la agencia en Nuevo México utilizando un nuevo propulsor del sistema de control de reacción que ya estaba previsto para su uso en un futuro vuelo de Starliner.
Recordamos que la nave ha sufrido también hasta cinco fugas de helio en los tanques de almacenamiento de helio que controlan los propulsores, pero según la información oficial estas no ponen en peligro el vuelo de regreso: en una conferencia de prensa el 18 de junio, los funcionarios reiteraron que Starliner necesita siete horas de helio para llegar a casa y tiene 70 horas a bordo.
De hecho, en caso de emergencia en la ISS, la cápsula podría regresar a la Tierra.
En todo momento se ha comunicado que los astronautas de la agencia Butch Wilmore y Suni Williams, la tripulación de la nave de Boeing, se encuentran bien y que están llevando a cabo diferentes tareas en la Estación Espacial Internacional.
Boeing y la NASA aún no están seguros de cuándo traerán a casa a Starliner. En una conferencia de prensa el miércoles, la agencia dijo que su objetivo es regresar a finales de mes, pero aún no se comprometió a una fecha concreta.
Se espera que las pruebas que deberían ayudar a explicar un problema persistente concluyan esta semana, momento en el que la misión tendrá más claridad sobre su final.
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