La Autoridad de los Mercados y la Competencia (CMA) de Reino Unido ha bloqueado la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft. La decisión se ha tomado ante la preocupación de que el acuerdo altere el futuro del mercado de videojuegos en la nube, dando un paso atrás en innovación y en las opciones para los jugadores en el país.
La CMA lanzó en septiembre de 2022 una revisión en profundidad del contrato y en febrero de este año reconocieron que la fusión provocaría que Microsoft reforzase su posición en el sector de juegos en la nube, dificultando el crecimiento de la competencia. Microsoft ha asegurado que apelará la prohibición, mientras que Reino Unido defiende su decisión, que se ha dado después de que la firma "no abordara de manera efectiva" las preocupaciones que tenían al respecto.
La multinacional firmó un contrato para la adquisición de la empresa responsable de Call of Duty (entre otros videojuegos) por 68.700 millones de dólares a principios de 2022. Por lo tanto, estaba dispuesta a pagar 95 dólares por cada acción. Ahora, el veto regulador ha frenado sus intenciones, las cuales Blizzard considera "desproporcionadas".
Actualmente, Microsoft ya representa un 60-70% de los servicios globales de juegos en la nube. A eso se le suma, la consola Xbox, ser el sistema operativo líder en ordenadores (Windows) y tener una infraestructura global de computación en la nube (Azure y Xbox Cloud Gaming), que acrecienta su importancia en la industria.
"El acuerdo reforzaría la ventaja de Microsoft en el mercado al darle control sobre contenido de juegos importante como 'Call of Duty', 'Overwatch' y 'World of Warcraft'", comenta la CMA. Los videojuegos en la nube permiten a los jugadores del país jugar evitando la compra de consolas costosas, con más flexibilidad y opciones, y Microsoft podría ganar una fuerte posición frente a los rivales.
Se calcula que los usuarios activos mensuales en Reino Unido se triplicaron a finales de 2022 con respecto a principios de 2021. Según las estimaciones, en 2026, este sector ganará hasta 11.000 millones de libras (12.427 millones de euros) a nivel internacional y 1.000 millones de libras (1.130 millones de euros) solo en el país anglosajón.
"Es vital que protejamos la competencia en este mercado emergente y emocionante", ha aclarado Martin Coleman, presidente del panel independiente de expertos de la CMA. Según cuenta, Microsoft se ha comprometido a "tratar de abordar estos problemas y estamos agradecidos por ello, pero sus propuestas no fueron efectivas para remediar nuestras preocupaciones y habrían reemplazado la competencia con una regulación ineficaz de un mercado nuevo y dinámico".
Lo que se esperaba con la adquisición de Blizzard
Microsoft iba a gastarse cerca de 70.000 millones de dólares, convirtiéndose en la mayor inversión de la compañía y del sector. Con la compra, la marca esperaba reforzar su división de 'gaming' y paliar el error que habían cometido al no invertir en la industria en el pasado.
Activasion iba a ser una de las firmas que Microsoft adquiriría, puesto que Mojang, creadora de Minecraft, la consiguió por 2.500 millones de dólares (2.207 millones de euros); y ZeniMax Media, con títulos como Fallout y DOOM, por 7.500 millones de dólares (6.622 millones de euros).
El paso atrás que Reino Unido le ha obligado atrás dificulta el interés de Microsoft de revolucionar el mercado de los videojuegos. De comprarse Activasion, los clientes de Xbox habrían tenido acceso a un catálogo de juegos muy amplio y hubiese catapultado a la firma a la cima con su consola, sobre todo por Call of Duty.
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