A la hora de organizar un viaje, siempre son bienvenidos los trucos para ahorrarse algo de dinero. Una buena forma para ello es el pet sitting, una ingeniosa forma para alojarnos en nuestro destino sin tener que pagar nada. Básicamente, se trata de cuidar de las mascotas de otras personas en su casa mientras estas están de viaje. De este modo, podemos disfrutar de un alojamiento gratuito en un destino de nuestro interés mientras nos hacemos cargo de los animales.
Qué es el pet sitting y cómo hacerlo
Tal y como indica su nombre, el pet sitting nos permite alojarnos gratuitamente en una casa mientras sus propietarios están fuera unos días a cambio de cuidar de sus mascotas. No solo se refiere a perros o gatos, sino a todo tipo de animales de compañía como pueden ser conejos, tortugas, peces, roedores…
Para poder ponernos en contacto con los dueños, existen aplicaciones y sitios web como Trusted House Sitter, PetBacker o Mad Paws, entre otras muchas opciones. En ellas tendrás que elaborar un perfil y después aplicar a las ofertas que nos interesen. De este modo, podemos buscar una oferta en un lugar al que queremos viajar y de ese modo poder visitarlo sin para alojamiento. Eso sí, siempre sin descuidar nuestras tareas como pet sitter.
Cuáles son las tareas mientras hacemos pet sitting
Cuidar de una mascota no siempre es tarea fácil. Obviamente nos tienen que gustar los animales, pero también debemos tener conocimientos básicos de cómo cuidarlos. Dependiendo del tipo de animal, algunas de las tareas principales serían darle de comer y beber, jugar con él, sacarle a hacer sus necesidades, cepillarle… Igualmente, nos pueden solicitar algunas tareas extra, como darles alguna medicina, llevarlos al veterinario o ir mandando fotos y videos para que los dueños estén tranquilos y sepan que su mascota está bien.
Por supuesto, debemos ser respetuosos con la casa donde nos alojemos y mantenerla en buen estado, es decir, limpiar y recoger cualquier desorden que generemos nosotros o la mascota. Además, como ventaja, no tenemos que hacer todo esto solo, ya que muchos propietarios permiten que el pet sitter sea una pareja, un grupo de amigos o una familia.
Para las mascotas también es ventajoso que se quede alguien a su cargo sin tener que moverse de su casa. Para empezar, el animal estará más cómodo y notará menos la ausencia de sus dueños al estar en su propio hogar, además evitaremos que se estrese por estar en un lugar desconocido y que rompa sus rutinas establecidas.
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