Una valiosa arquitectura de los siglos XVII y XVIII, monumentos históricos, un balneario, un magnífico entorno natural… El pueblo de Liérganes, en Cantabria, lo tiene todo, no en vano forma parte de la asociación de Los Pueblos más Bonitos de España. En definitiva, esta localidad se presenta como un destino perfecto para una escapada rural que, además, nos sumerge en un fascinante mundo de leyendas.
Un interesante conjunto urbano y aguas medicinales
La villa de Liérganes, capital del municipio homónimo, atrae a los turistas por su precioso conjunto urbano, declarado de interés histórico-artístico nacional. "Concentra una valiosa arquitectura clasicista de los siglos XVII y XVIII, fruto del auge económico que la fábrica de artillería (instalada en el año 1622) propició en ese período en la comarca", señalan desde Turismo de Cantabria.
La historia del pueblo también está ligada a la de su balneario, y es que ya desde finales del siglo XVII los enfermos utilizaban las aguas. Tal y como explican desde el ayuntamiento de la localidad, "no fue hasta mediados del siglo XIX cuando el Balneario de Fuensanta, empieza a cobrar un protagonismo que ya a finales del siglo hace girar toda la vida de Liérganes en torno a él".
A día de hoy, son muchos los habitantes que acuden al lugar para disfrutar de las propiedades de estas aguas sulfuradas, cálcicas y sulfatadas, efectivas para el tratamiento de varias patologías. Entre las instalaciones, cuenta con termas secas y húmedas, ducha tropical, jacuzzi, pediluvios, sillones calientes, chorros de agua y una piscina termal.
Historias entre lo real y la ficción
El núcleo urbano se asienta a los pies de las elevaciones de Marimón y Cotillamón. Dando un paseo por sus muchos atractivos podremos conocer sus casonas populares, el Palacio de Rañada, la iglesia de San Sebastián, la parroquia de San Pedro Ad Víncula, la Casa Setién (1565) y las capillas del Humilladero y el Carmen. Destacan otros puntos como la Plaza del Vitote o el Puente Mayor, construido en el año 1606 con dos arcos de medio punto.
Junto a dicho puente, se alza uno de los molinos mejor conservados de Liérganes, levantado en 1667. Este estuvo en funcionamiento hasta finales del siglo XIX, pero a día de hoy acoge el Centro de Interpretación de la leyenda del hombre pez, que "como todas las leyendas tiene algo de real (su protagonista, Francisco de la Vega) y algo de ficción (su variado final)", detallan desde el ayuntamiento.
La historia cuenta que este vecino se lanzó un día a la ría de Bilbao y se fue nadando hasta perderse de vista. Al muchacho lo dieron por muerto, hasta que apareció cinco años después en la bahía de Cádiz cubierto de escamas. Según continúa la leyenda, lo llevaron de vuelta a Liérganes y allí vivió nueve años más hasta que volvió a desaparecer en las aguas.
Cómo llegar a Liérganes
El trayecto entre la ciudad de Santander y Liérganes es de tan solo 20 minutos en coche por la S-10.
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