Saltos de agua, toboganes, pozas y alturas de vértigo. A lo largo de la geografía española nos encontramos con una gran cantidad de barrancos que podemos atravesar en interesantes rutas que nos sumergen de lleno en la naturaleza. Eso sí, muchas de ellas son solo aptas para barranquistas experimentados.
Barranco de Badajoz (Tenerife)
A pesar de su nombre, este barranco se encuentra en la localidad de Güímar, en la isla de Tenerife. Este lugar no solo destaca por su desnivel de 700 metros, sino que es famoso por sus las leyendas y misterios que se esconden entre sus dos enormes paredes.
Río Verde (Granada)
La ruta que recorre el barranco del río Verde nos lleva por sus terrenos montañosos, arroyos y cañones formados por la erosión del agua. Un lugar perfecto para practicar barranquismo. Durante todo el camino, nos acompañará la interesante flora del lugar, con gran cantidad de endemismos.
Gorg Blau (Mallorca)
Una de las más bellas gargantas de toda España y de Europa es el Gorg Blau, en la isla de Mallorca. La ruta para recorrer este torrente es larga y exigente, y serpentea entre saltos de agua y paredes de roca de hasta 300 metros de altura.
Cañón del Vero (Huesca)
El río Vero ha ido excavando las rocas calcáreas entre las localidades de Lecina y Alquézar hasta crear un impresionante cañón repleto de abrigos y cuevas. Al recorrerlo también encontramos saltos de agua, además de una gran variedad de fauna como buitres leonados, halcones o águilas reales.
Os Lucas (Huesca)
En pleno Valle de Tena, nos adentramos en el barranco de Os Lucas. El mejor momento para visitarlo es cuando su caudal lleva abundante agua, de modo que nos permite disfrutar de sus saltos de agua, cascadas y pozas cristalinas.
Barranc de l’Infern (Alicante)
Al norte de la provincia de Alicante, en el Vall de Laguar, la tierra se abre formando el angosto barranc de l’Infern, moldeado por las aguas del río Girona. Se recorre en una ruta circular con más de 6.800 escalones de piedra.
Barranc de l’Infern (Lleida)
En la provincia de Lleida encontramos otro barranc de l’Infern. Este es uno de los más espectaculares del Pirineo leridano y para entrar en él se debe cruzar el río Noguera Pallaresa a pie, nadando o con una divertida tirolina. A lo largo del camino encontraremos diferentes saltos, toboganes y una cueva de 20 metros.
Gorgas Negras (Huesca)
Es una verdadera aventura descender el barranco de Gorgas Negras, en la Sierra de Guara. Este recorrido creado por la erosión del río Alcanadre solo es apto para profesionales y barranquistas experimentados debido a su dificultad y exigencia, y es que tiene una duración de 12 horas.
Barranco de Mascún (Huesca)
En el Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara, el río Mascún ha modelado la roca calcárea hasta crear este recorrido rocoso donde practicar senderismo, escalada o barranquismo rodeados de increíbles formaciones rocosas.
Aigüeta de Barbaruens (Huesca)
El barranco de Aigüeta de Barbaruens, en el valle de Benasque, nos ofrece una jornada entretenida y muy completa a través de toboganes y saltos de agua en un descenso acuático no apto para novatos.
Apúntate a la newsletter y recibe en tu correo las mejores propuestas para viajar por el mundo.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios