Para viajar en familia de manera responsable, experimentar un contacto íntimo con la naturaleza o disfrutar de la calma de la vida rural. Nuestra geografía está plagada de rincones donde entregarse a la versión más ecológica de las vacaciones.
SOBREVOLAR LA RIOJA EN GLOBO
La tierra que ha hecho de su vino un arte hasta convertido en el mayor orgullo de su patrimonio (y en el complemento perfecto de su gastronomía) es, además, una fuente de ideas para abordar un viaje en pleno contacto con la naturaleza. Una de ellas, de lo más divertida, es la de sobrevolar los viñedos a bordo de un aerostato. Una aventura que propicia una sensación de libertad, mientras el sol se asoma por la sierra y una alfombra de cepas retorcidas se despliega bajo los pies enmarcando el sinuoso curso del río Ebro. En Haro, numerosas agencias ofrecen esta experiencia, que también puede incluir un brindis de altura, un almuerzo reponedor (por supuesto, con vino de la tierra) y un diploma acreditativo de este reconfortante bautismo aéreo.
EL CAMINO DE SANTIAGO HASTA FINISTERRE
Muchos no saben que la ruta más antigua, concurrida y celebrada del viejo continente tiene una suerte de epílogo que va más allá de la catedral donde descansa la tumba del Apóstol. Lo llaman la Prolongación Jacobea (o el Camino de Fisterra y Muxía) y consiste en un trayecto mítico-simbólico que parte de Santiago de Compostela hasta el Cabo de Finisterre. Numerosos peregrinos optan por alargar su aventura, a pie o en bicicleta, para abordar este apéndice que, además de seguir el perfil de un litoral hermoso y abrupto, es fruto de una tradición milenaria: la de caminar siguiendo el curso del sol hasta los confines de la tierra, allí donde la Costa da Morte era el límite del mundo conocido.
Numerosos peregrinos optan por alargar su aventura con una tradición milenaria: caminar siguiendo el curso del Sol hasta los confines de la Tierra
ACTIVIDADES NÁUTICAS EN LAS LAGUNAS DE RUIDERA
Considerado una de las Siete Maravillas Naturales de España, a este parque natural asentado en medio de los campos de Albacete y Ciudad Real a menudo lo comparan con Plitvice, la maravilla líquida de Croacia: en términos científicos, ambos constituyen la mejor representación de lagos formados por la acumulación de carbonato cálcico. Pero más allá de su valor geológico, este lugar conforma todo un espectáculo visual. Un conjunto de quince lagunas conectadas entre sí a través de cascadas que enlazan unas con otras como vasos comunicantes y que están abrazadas por un manto de frondosos bosques. Por todo ello, se trata de una opción fantástica para darse un buen chapuzón. Eso o practicar algún deporte náutico, como vela, kayak o paddle surf.
GLAMPING EN LA COSTA DAURADA
Coquetos bungalows, tiendas de diseño, caravanas en cuyo interior se esconden suites de cinco estrellas. El concepto de acampada ha dado una vuelta de tuerca para revestirse de confort, estilo, elementos ecológicos, servicios de primera y el privilegio de encontrarse inmersos en plena naturaleza. Es lo que llaman glamping o camping con glamour. Una experiencia que aúna las ventajas del alojamiento al aire libre con las comodidades de un hotel de alta gama. La Costa Daurada, esa bella franja de Tarragona encajada entre el mar y la montaña, se ha convertido en un referente de esta tendencia al recibir las mayores distinciones del sector campista europeo. El Camping Playa Montroig (ubicado en Miami Playa), el Camping Els Prats (cerca de Mont-roig del Camp) o Sangulí (en Salou) son sólo algunos ejemplos.
Acampar en la naturaleza pero con servicios y elementos ecológicos de primera es lo que llaman glamping o camping con glamour
SENDERISMO EN LOS CAÑONES DEL EBRO
Considerado uno de los parajes más bellos de la Península Ibérica, el Parque Natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón, que se extiende a lo largo de unas 46.000 hectáreas, tiene en el agua su gran protagonista. Por eso un plan exigente (pero a la vez refrescante) es emprender el sendero de largo recorrido que transcurre por este tesoro castellano y leonés: el Camino Natural del Ebro GR 99, que acompaña el curso del río padre a lo largo de 930 kilómetros y 42 etapas, ocho de las cuales tienen lugar en tierras de Burgos. Que no teman los menos aventureros porque también para ellos hay múltiples caminos para disfrutar de esta sucesión de hoces que dibujan un paisaje de riberas escarpadas, bosques tupidos y meandros que serpentean en los valles.
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