En la frontera entre Badajoz y Portugal, el recorrido del río Guadiana se ve interrumpido por la inmensidad del embalse de Alqueva. Se trata del lago artificial más grande de toda Europa, con 250 kilómetros cuadrados de superficie llenos de interesantes actividades turísticas y rodeados de un sinfín de lugares que visitar.
Deportes náuticos, senderismo y rutas en bici
El lago Alqueva se construyó en la región portuguesa del Alentejo para generar electricidad y como infraestructura para los cultivos de regadío, pero también para un uso turístico. Este lugar se ha convertido en una importante zona para las actividades náuticas, a pesar de no encontrarse en la costa. Por ejemplo, se puede practicar vela, esquí acuático, wakeboard, piragua y kayak, entre otros.
Pero sus 1.200 kilómetros de costa nos brindan muchas más opciones de ocio, desde darnos un refrescante baño en sus aguas, hasta hacer un picnic con las mejores vistas o recorrer alguna ruta de senderismo o ciclismo que nos descubra los bellos rincones que esconde el lugar.
Dormir bajo las estrellas o volar sobre el lago
Por si fuera poco, una actividad muy llamativa que podemos hacer en el lago Alqueva es pasar la noche en una casa-barco y disfrutar del manto de estrellas que nos cubrirá cuando se esconda el sol. Y es que esta zona es perfecta para la observación del cielo nocturno. De hecho, en el pueblo de Alqueva, encontramos un Observatorio Astronómico que nos permitirá contemplar el universo a través de sus telescopios.
Y para los amantes de las alturas, una forma diferente de visitar el embalse es a vista de pájaro. Podremos elegir entre volar en globo aerostático o hacer un recorrido en avioneta, pero siempre con las mejores vistas del lugar como acompañante.
Pueblos a cada lado de la frontera
Son muchos los pueblos, tanto en el lado portugués como en el español, que podemos visitar cerca del lago. Por ejemplo, la preciosa villa de Monsaraz está construida en lo alto de un peñón y nos regala unas vistas espectaculares del lago. Pero también podemos visitar otras poblaciones como Amieira y sus playa fluvial o Mourão y su castillo.
En el lado español nos esperan otros lugares como Olivenza, que perteneció al país vecino durante mucho tiempo, o Cheles, con una zona de baño muy popular conocida como La Dehesa.
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