Qué ver en un fin de semana en Budapest

A ambas orillas del Danubio se extiende la ciudad de Budapest, que poco a poco se ha ido convirtiendo en una de las urbes favoritas para visitar en el continente europeo. Y es que la capital húngara es el destino perfecto para una escapada de fin de semana, y así disfrutar de su rica historia y su vasto patrimonio arquitectónico y cultural, sin olvidar su deliciosa escena gastronómica.

Las visitas imprescindibles

El Danubio divide la ciudad en las zonas de Buda y Pest, conectadas por el emblemático puente de las Cadenas. A un lado, en Buda, podemos iniciar nuestra ruta en la plaza Szentháromság, donde encontramos la iglesia de Matías y el Bastión de los Pescadores. Desde allí podemos dirigirnos a la plaza Clark Ádám y tomar un funicular hasta el majestuoso Castillo de Buda y el Palacio Sandor, disfrutando de las mejores visitas de la ciudad durante el trayecto.

Al otro lado de la orilla, en Pest, es imprescindible conocer el imponente edificio del Parlamento y su rica ornamentación de estilo neogótico con rasgos renacentistas y barrocos. La vista toma entre 45 y 50 minutos, e incluye el hemiciclo y el salón de la cámara alta, la cúpula y la escalera de gala.

Y no podemos olvidar que Budapest es también un importante destino termal. El lugar más famoso para disfrutar de sus aguas son los Baños Széchenyi, con sus 15 piscinas de agua caliente ubicadas al aire libre. El contraste entre la temperatura exterior y las aguas que brotan a 37º C es toda una experiencia.

Dónde comer

Budapest ha logrado una fama gastronómica mundial gracias a la calidad de su café. Podremos disfrutar de esta bebida en lugares tan mágicos como Lotz Hall Terem, una preciosa cafetería con techos y ventanales dignos de un palacio. Al igual que el tradicional New York Café, considerada una de las cafeterías más bonitas del mundo. Por otro lado, se nos hará la boca agua con los deliciosos platos de la gastronomía húngara que podremos probar en restaurantes como SZÉK Restaurant & Bar o Retek Bisztró.

Dónde dormir

A lo largo de la ciudad encontramos numerosos alojamientos como el Verdi Gran Hotel, muy cercano al centro y a tan solo 20 minutos del Museo Nacional de Hungría. O el Exe Carlton Hotel Budapest, con una ubicación inmejorable a los pies del Bastión de los Pescadores y a 100 metros del puente de las Cadenas.

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