La ruta de Marruecos para dormir bajo las estrellas y visitar el Hollywood africano

Entre los valles del río Draa, del Dades y del Ziz se puede disfrutar de experiencias únicas en uno de los rincones más auténticos de Marruecos
Preciosa vista de la ciudad de Ouarzazate.
Preciosa vista de la ciudad de Ouarzazate.
Carlos Castilla Jiménez
Preciosa vista de la ciudad de Ouarzazate.

Se le conoce como La Puerta del Desierto y es que desde tiempos inmemorables Ouarzazate es un cruce de caminos entre los valles del Draa, del Dades y del Ziz. Una antigua ruta comercial que conectaba la bulliciosa Marrakech con el resto de África y que hoy sigue siendo uno de los rincones más auténticos de Marruecos.

La ciudad de Ouarzazate, al sur de Marruecos, conocida como La Puerta del Desierto, es el punto de partida de esta ruta

El perfil de Ouarzazate lo define la kasbah de Taourirt, construida con el característico adobe rojizo y reconocible por sus tres torres. Las kasbahs son casas fortificadas de origen bereber que se construían para defender a los pueblos. La de Ouarzazate, construida en el siglo XVIII, está considerada la más bonita de todo Marruecos. Gracias a su estupendo estado de conservación y a una delicada restauración es posible recorrer su interior y perderse entre su laberinto de pasillos y habitaciones. Tal y como hay que recorrer después el centro, que, como el resto de ciudades marroquíes, también cuenta con un interesante zoco.

Kasbah de Taourirt en Ouarzazate.
Kasbah de Taourirt en Ouarzazate.
Getty Images/iStockphoto

Unos pocos kilómetros separan Ouarzazate de otra espectacular kasbah, la de Ait Ben Hadu, un auténtico pueblo museo. Un poco más antigua que la primera, esta se alza en lo alto de una colina, por lo que domina el valle de Ounila y permite disfrutar de unas preciosas vistas del grandioso Atlas, el río Unila y el paisaje desértico que ya se adivina al fondo.

De cine

Fue aquí a donde llegaron las primeras cámaras de cine y es que este paisaje se puede adivinar en películas como “Lawrence de Arabia”, “Babel”, “Indiana Jones” y, cómo no, también en la serie “Juego de Tronos”.

Los Estudios Atlas han cumplido 40 años y mantiene decorados de películas míticas de la historia del cine 

Tan populares empezaron a ser sus paisajes y pueblos que la zona pronto se volcó en el mundo del cine. En esa apuesta por el séptimo arte crearon los Estudios Atlas, que ya han cumplido 40 años en activo y que podrás reconocer en historias como “Cleopatra”, “La Joya del Nilo”, “Gladiator”, “El Reino de los Cielos” o “Astérix” o visitando sus instalaciones, donde siguen parte de sus decorados. Superproducciones que contaban casi con más extras que habitantes tenía la ciudad y que han logrado que a Ouarzazate se la conozca hoy como el Hollywood de África.

Kasbah de Ait Ben Hadu.
Kasbah de Ait Ben Hadu.
Picasa

Decorado natural

Seguro que muchas de las estrellas de cine que pasaron por estos estudios aprovecharon para adentrarse en el desierto. Desde Ouarzazate es fácil, solo hay que seguir el camino que te lleva por pequeños pueblos de adobe, otras muchas impresionantes kasbahs y algunos oasis verdes que salpican el camino mientras el paisaje cambia hasta llegar al verdadero desierto.

Una vez en el desierto se puede disfrutar de un típico paseo en camello, saltar dunas en un 4x4 y dormir en una haima

Una vez allí, además de disfrutar de atardeceres únicos y las muchas actividades que se ofertan (desde el típico y tranquilo paseo en camello a la adrenalina de saltar dunas en un 4x4), hay que pasar la noche en pleno desierto. Sí, en una haima y con un techo de estrellas solo para ti.

La oferta es amplia y variada tanto en forma como en precio, por lo que seguro que encuentras una opción que se ajuste. Son muchos los campamentos que ofrecen esta experiencia. Instalaciones que siguen la tradición bereber y que, a pesar de ser temporales, cuentan con todos los detalles (desde baño propio hasta aire acondicionado, dependiendo del presupuesto). Las simples haimas adquieren otro aspecto cuando las cubren de telas y alfombras y las distribuyen alrededor de una hoguera que servirá de punto de encuentro.

Campamento en la noche del desierto.
Campamento en la noche del desierto.
iStock

Última parada

Antes de decir adiós a este rincón mágico de Marruecos hay que disfrutar por todo lo alto de su gastronomía. Y un lugar ideal para despedirse es la Kasbah des Sables, uno de los restaurantes más típicos y bonitos de Ouarzazate. Y si todavía no sabes dónde alojarte (los días que no estés en la haima), échale un ojo al Riad Dar Kamar, un pequeño hotel que parece sacado de una revista.

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